CUIDADO DESPUÉS

El primer dÃa
Deje su vendaje durante al menos dos horas después de su sesión de tatuaje. Esto permitirá que tu piel comience el proceso de curación y evitará que las bacterias entren en el tatuaje. Después de quitar el vendaje, lava suavemente su tatuaje con un jabón suave sin fragancia y agua tibia. No frote el tatuaje y evite usar una esponja vegetal. Seque su tatuaje con una toalla limpia o una toalla de papel. No frotes ni rasques el tatuaje, ya que esto puede dañarlo y retrasar el proceso de curación. Aplique una capa delgada de humectante sin fragancia y sin base de petróleo al tatuaje. Esto ayudará a mantener la piel hidratada y evitará la picazón. Evite tocar o pellizcar el tatuaje, ya que esto puede introducir bacterias y provocar una infección. Use ropa holgada que no roce el tatuaje y evita exponerlo a la luz solar directa o sumergirlo en agua durante los primeros días.
Proceso curativo
Después de hacerse un tatuaje, el proceso de curación suele tardar un par de semanas. Inicialmente, el tatuaje estará adolorido y sensible al tacto, y el área circundante puede estar hinchada y enrojecida. Durante los próximos dÃas, se puede formar una costra sobre el tatuaje y puede comenzar a picar a medida que la piel comienza a sanar. Es importante evitar rascarse o tocarse la costra, ya que esto puede dañar el tatuaje y aumentar el riesgo de infección. Durante este tiempo, es importante mantener el tatuaje limpio e hidratado y evitar exponerlo a la luz solar directa o sumergirlo en agua durante perÃodos prolongados. Con el cuidado adecuado, su tatuaje continuará sanando y luciendo mejor en los años venideros.


Atención especial
Después de hacerse un nuevo tatuaje, es importante prestarle especial atención para asegurarse de que sane correctamente y se vea lo mejor posible. Durante las próximas semanas, debes evitar exponer el tatuaje a la luz solar directa, sumergirlo en agua o usar ropa ajustada o restrictiva que pueda rozarlo. También debes evitar tocar las costras que se formen y asegurarte de mantener el tatuaje limpio e hidratado. Es importante usar un jabón suave y sin fragancia al lavar el tatuaje y aplicar una capa delgada de humectante sin perfume y sin base de petróleo varias veces al dÃa. También debes evitar rascarte o frotarte el tatuaje, ya que esto puede dañarlo y aumentar el riesgo de infección.